Dios actúa de maneras que nosotros no imaginamos y usa a personas no con
una bata blanca y resplandeciente sino a ángeles de carne y hueso que cruzan
nuestro camino, y nos defienden. Agradezco a Dios Porque me protegió.
Estaba dentro de mi auto estacionada en una calle de la ciudad junto a mi hija de 2 años, esperábamos por un familiar. Un hombre llegó con un pedazo de botella de vidrio filoso por mi ventanilla, me lo acercó y pidió que le diera la cartera.
Yo me estaba tomando una
leche, se la eché encima y empecé a gritar: Auxilio!!! Auxilio, este hombre me
quiere robar!! .
Mi hija gritaba y
lloraba. En eso, veo un señor muy bien vestido que se acerca, se pone al
lado de mi ventanilla y le dice: Qué es lo que pasa?-
El ladrón cambió y dijo: No
nada, niña no llore. Y se alejó.
El hombre bien vestido me
preguntó si me había hecho daño, le dije que no, agradeciéndole. Se fue también
y agradecí a Dios por ese ángel que había enviado a cuidarnos. por Mery Bracho
Por Mery Bracho