Qué difícil es cuando alguien quiere controlarte

Qué difícil es cuando alguien quiere controlarte

Hace unos días estábamos en la oficina otra persona y yo usando diferentes laptops. Teníamos dos ratones de computadora iguales, inalámbricos. 

 Pasado un rato, la otra persona que estaba tocando una pieza musical en la flauta viéndola en la laptop, se sintió extraña porque alguien movía el mouse sin que fuera ella, y perdía de vista frases de la pieza que tocaba.  

Por un momento ella pensaba que era un problema de la laptop, y trató de controlar el mouse. Pero al rato otra vez tenía el problema.  El caso era que MI ratón estaba controlando su laptop y estaba causando todo esto.

¿Te ha pasado alguna vez que te sientes controlado por alguien? 

Puede ser que escojan hasta tu forma de vestir, lo que dices o no, controlan tus gustos, cuando llegan al restaurante es esa otra persona que decide por tí.  En el peor de los casos, te obligan a amarlos de cierta manera injusta para ti.  Son controladores como el ratón en la otra computadora.

¿Qué podemos hacer con una persona que nos controla o al menos lo intenta?

1. Reconoce que eres controlado

Si hemos crecido en hogares donde lo normal fue tener un padre controlador, nos costará entender que esto no es lo más saludable en una relación porque fue lo normal en casa.

2. Conoce tus límites. Determina dentro de ti qué te gusta y qué no te gusta, cómo quieres ser tratado, con quién quieres pasar tu tiempo, cuánto tiempo, qué quieres compartir y qué no, hasta dónde quieres llegar en una relación.

3. Ármate de valentía para vencer el miedo de enfrentar al controlador, Dios nos da un espíritu de poder, amor y dominio propio, dile a Dios que te ayude en esta situación.

4. Empieza por pequeñas batallas, escogiendo tú primero cuando haya que decidir, y manteniendo la palabra firme, y a medida que vayas ganando, haciéndolo con cosas más importantes.

5. Mírate a ti mismo como una persona de gran valor y digna de ser tratada con respeto, consideración y honor.

6. Reconoce que no será fácil pero es como subir escalones, a medida que avanzamos estaremos más cerca de vencer el control.

7. No desmayes ni te rindas, el que se rinde pierde. Todo lo puedes en Cristo que te fortalece!.

Por Mery Bracho