¿Sabías que el creador del Premio Nobel de la “Paz” fue el inventor de la dinamita? En principio inventó la dinamita con fines positivos, para agilizar la explosión de montañas, para la excavación y para hacer caminos. Pero el invento se empezó a usar en la guerra.
Alfred Nobel fue un químico que registró 350 patentes, tenía junto a su familia una empresa petrolera y de allí deriva su gran fortuna que la destinó en su mayoría a los Premios Nobel los cuales se dan en Literatura, Medicina, Física, Química y Paz.
En una de sus empresas un día hubo una explosión y murió un hermano de Alfred, el mundo pensó que era él quien había muerto y al día siguiente salió en la prensa que había muerto el creador de la dinamita que se había usado para destruir y matar muchas personas.
Alfred Nobel, no quiso ser recordado con semejante historia, él era amante de la paz y no de la guerra, por eso creó los Premios Nobel que se cubrirían con la fortuna que dejó en su testamento.
¿Has pensado cómo quieres ser recordado cuando ya no estés? ¿Has analizado tu presente, lo que estás haciendo en tu familia, en tu comunidad y lo que piensas hacer para dejar una huella de paz y de amor? No sabemos cuánto tiempo viviremos pero tenemos el día a día, no esperemos hasta tener mucho para hacer más, hagamos algo con lo que tengamos actualmente y Dios nos bendecirá, promueve el amor y la paz con tu ejemplo. Por Mery Bracho
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