En la mañana cuando estamos listos para levantarnos de la cama y enfrentar el día que tenemos por delante necesitamos pedir ayuda a Dios, le pediremos que nos guíe por su camino y nos ayude a hacer las cosas bien.
¡Quisiéramos que siempre esto fuera posible!, pero tú y yo sabemos que somos débiles y a veces las tentaciones nos superan.
Por eso necesitamos orar con esta corta oración de hoy siempre.
Comienza el nuevo día con esta oración corta
¡Por favor, Señor, no te des por vencido conmigo!
Cada día ésta será nuestra oración.
La oración la tomé del Salmo 119:8 que dice:
"Obedeceré tus decretos; ¡por favor, no te des por vencido conmigo!".
Desde antes de levantarnos meditaremos en la cama sobre cómo vamos a vivir el nuevo día.
Es importante tomar decisiones antes de enfrentarnos a situaciones de tentaciones, donde nuestros valores y creencias se vean comprometidos.
Nos levantaremos con el firme propósito de ir por el camino correcto, de hacer lo correcto, de decir lo verdadero y de tener la mejor actitud.
Es una decisión diaria. Porque tal vez mañana se nos presentarán nuevas tentaciones, nuevas oportunidades que comprometan el compromiso que hemos hecho con Dios.
El Salmo 119:11 dice: "He guardado tu palabra en mi corazón, para no pecar contra ti".
En el corazón, en el asiento de las emociones y el intelecto guardo las palabras que he aprendido de la Biblia, serán el filtro por el que pasaré mis decisiones.
Dios nos ayudará a seguir el camino correcto, que es el camino de la justicia, de la verdad, es el andar en sabiduría, actuando con prudencia, siendo honestos, sinceros, completamente transparentes.
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Todos lo podemos lograr, no importa cuán débiles seamos.
El Espíritu Santo nos ayuda aún en nuestras debilidades.
Digamos a Dios esta oración:
Oración corta para este nuevo día.
Señor, no te des por vencido conmigo, hoy voy a seguir tus enseñanzas. ¡Ayúdame!, te necesito. Hoy voy contigo, que pueda reflejar tu amor y tu verdad, que esté atento a tus enseñanzas y a ponerlas en práctica con diligencia.
Gracias por estar a mi lado y no abandonarme nunca. Gracias porque aunque la vida no siempre es fácil puedo contar contigo que me rodeas con tu escudo de amor y misericordia.
Me entrego en tus manos para hacer tu voluntad y no pecar.
Ten paciencia conmigo, que pueda ir mejorando cada día en el camino de la vida.
Te pido que me des la victoria en las dificultades que se me presenten, que crezca y aprenda a hacer las cosas bien, sin fallar.
En el nombre de Cristo te lo pido. Amén.
MeryBracho
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